En la etapa de la adolescencia hay una búsqueda de identidad y pertenencia, la cual se experimenta de diferentes formas. Existe una característica social que se mantiene en el tiempo y es que los jóvenes utilizan un lenguaje o jerga que emerge cómo código compartido dentro de los grupos de pares. En la Terapia Psicológica con Adolescentes hemos entendido que el lenguaje es dinámico, sensible a los cambios culturales y sociales; por lo que no solo cumple con una función comunicativa, sino también social, emocional y psicológica.
Esta jerga adolescente se caracteriza por ser creativa, sencilla, emplea el humor, utiliza extranjerismos con abreviaturas y se utiliza tanto verbalmente como en la escritura digital (ejemplo: en los chats).
Actualmente, hay una gran influencia de las redes sociales, las plataformas digitales aceleran la difusión de modismos y memes lingüísticos. Expresiones que antes circulaban localmente hoy se vuelven globales casi que de manera inmediata. Esto contribuye a que la jerga adolescente sea altamente volátil, marcada por tendencias virales y referentes de la cultura digital.
A continuación, se encuentran algunas de las palabras que utilizan los jóvenes hoy en día y el significado que tiene:
- Al pelo: Algo perfecto, justo como debe ser.
- Bacano / Chévere / Brutal: Algo agradable o muy bueno.
- Bro / Mano: Amigo.
- Camello/laburo: Trabajo duro.
- Charro: Algo ridículo, medio ridículamente chistoso.
- Chimba: Algo muy bueno, genial o divertido.
- Crack: Términos para referirse a alguien que es muy bueno en algo.
- Cringe: Algo que da vergüenza ajena o incomodidad.
- Filo: Qué se tiene hambre.
- Funar: Denunciar o exponer públicamente a alguien por comportamiento reprochable.
- Gas: Expresión de asco o disgusto
- Guayabo: Resaca o sensación de arrepentimiento emocional.
- Ghostear: Dejar de responder sin explicación.
- Mamera: Algo aburrido o tedioso.
- Melo: Algo muy bueno o excelente.
- Paila: Cuando algo sale mal o no funciona.
- Parce / Parcero(a): Amigo
- Parchar / Parche: Pasar el rato con los amigos o el plan mismo.
- Sisas: Afirmación en tono entusiasta: “¡Sí, claro!”.
- Stalkear: Revisar el perfil de alguien obsesivamente en redes.
- Vaina: Término para denominar: “cosa”, “situación” o “problema”.
A nivel educativo y formativo, tanto los docentes, padres y profesionales de la salud mental que interactúan con los jóvenes, deben comprender la jerga que utilizan, no para adoptarla de forma artificial, sino reconocerla como una manifestación legítima de la identidad juvenil. Validar este código facilita la comunicación, reduce la brecha generacional y fortalece el vínculo con ellos(as).
En conclusión, la jerga adolescente es mucho más que un conjunto de palabras raras, mal sonantes o “modas”. Constituye un fenómeno lingüístico, social y psicológico que refleja la necesidad de pertenencia, autonomía y expresión propia. Comprenderla abre la puerta a un diálogo más empático con los jóvenes, establecer conversaciones más fluidas y de confianza, reconociendo en su lenguaje una herramienta clave de construcción de identidad.