¿Las expectativas están afectando tu relación de pareja?

Las expectativas son como guiones invisibles que escribimos sobre cómo queremos que actúe nuestra pareja. Aunque tener expectativas es natural, estas pueden convertirse en una fuente de frustración y conflicto si no se manejan de forma adecuada. A continuación te brindamos algunas recomendaciones para lidiar con las expectativas y construir una relación más saludable con tu pareja:

1. ¿De dónde vienen esas expectativas?

Nuestras expectativas suelen tener raíces profundas en nuestras experiencias previas, valores y creencias. Tal vez esperas que tu pareja sea romántica porque creciste viendo películas que idealizan ese comportamiento, o quizás crees que debe actuar de cierta forma porque así lo hacían las parejas a tu alrededor. Reflexiona sobre el origen de esas ideas y si son realistas o simplemente heredadas.

Ejercicio:

Haz una lista de las expectativas que tienes con tu pareja. Al lado, anota de dónde crees que provienen. Pregúntate si es una expectativa genuinamente tuya o si la aprendiste de algún lado.

2. Diferencia entre necesidades y expectativas

Tener necesidades en una relación es completamente válido, pero no debemos confundirlas con expectativas irreales. Las necesidades son esenciales para el bienestar emocional (como el respeto, la comunicación y el apoyo). Las expectativas son ideas rígidas sobre cómo «debería» comportarse tu pareja.

Consejo práctico:

Comunica tus necesidades de manera clara y escucha las de tu pareja. Esto fomenta un entendimiento mutuo y evita malentendidos.

3. Acepta a tu pareja tal como es

Cuando nuestras expectativas no se cumplen, tendemos a sentirnos decepcionados. Es importante recordar que tu pareja es un ser humano independiente, no es un reflejo de lo que tú quieres o necesitas que sea. Aprender a aceptar a tu pareja tal como es, es clave para una relación más sana.

Reflexión:

¿Estoy viendo a mi pareja por lo que es o por lo que quiero que sea?

4. Suelta el control

La vida no siempre se ajusta a nuestras expectativas, y eso incluye nuestras relaciones. Practicar la flexibilidad emocional implica aprender a soltar el control y adaptarse a la realidad tal como es.

Estrategia:

Cuando sientas frustración por algo que tu pareja hizo (o no hizo), detente y respira profundamente. Pregúntate: “¿Esto es realmente importante? ¿Puedo dejarlo ir?”

5. Cultiva la gratitud y el presente

En lugar de enfocarte en lo que tu pareja no está haciendo, concéntrate en las cosas que sí hace. La gratitud es una herramienta poderosa para transformar tu perspectiva y fortalecer tu relación.

Ejercicio:

Cada día, anota una cosa que agradezcas de tu pareja, por pequeña que sea. Este hábito te ayudará a valorar más la relación y soltar expectativas innecesarias.

6. Construye acuerdos, no demandas

En lugar de imponer expectativas, construyan juntos acuerdos que funcionen para ambos.

Ejemplo:

Si esperas que tu pareja sea más comunicativa, en lugar de demandarlo, propón juntos un espacio para hablar sobre cómo se sienten ambos.

Conclusión

Dejar de tener expectativas no significa conformarse con menos, sino abrir espacio para aceptar a tu pareja tal como es y construir una relación más genuina y enriquecedora. Al soltar las expectativas, te liberas de una carga emocional innecesaria y permites que el amor fluya de manera más natural.

Recuerda, una relación sana no se basa en cumplir ideales, sino en crecer juntos desde la realidad de quiénes son.

Suelta las expectativas y vive más feliz… En Padma contamos con psicólogos expertos en temas de pareja para ayudarlos a crecer juntos.

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